Ante la fuerte nevazón que ha afectado a Punta Arenas en las últimas horas, el municipio ha desplegado más de 150 toneladas de sal en las calles para intentar garantizar la seguridad vial. A pesar de los esfuerzos, las condiciones climáticas han dificultado el tránsito vehicular en las principales arterias de la ciudad.
La directora de Operaciones del municipio, Sonia Vargas, explicó que se han presentado demoras en el despeje de sectores periurbanos, pero se encuentran trabajando para solucionar la situación. Además, se ha solicitado suspender las clases en todos los establecimientos de la comuna para minimizar el tránsito de peatones y vehículos y así prevenir accidentes.
Vargas recalcó que la nieve no es una emergencia, sino que las condiciones de conducción insegura provocan situaciones complicadas. Por ello, se ha coordinado un plan de acción con la entrega de alrededor de 200 toneladas de sal desde mayo, y se espera recibir más para hacer frente al invierno recién comenzado.
En cuanto a la suspensión de clases, la directora municipal indicó que se tomó la decisión luego de constatar las dificultades de traslado en la ciudad. Se espera que con los turnos de 24 horas y de 24-7 implementados por la dirección de Operaciones, se puedan enfrentar de mejor manera las condiciones climáticas adversas durante el invierno en Punta Arenas.